Microsoft presenta Windows 8Microsoft ha presentado el nuevo Sistema Operativo Windows 8 en  Shanghái, China.

El objetivo de Microsoft al sacar Windows 8 es posicionarse en el mundo de los dispositivos portátiles, como son las tabletas y los teléfonos inteligentes, área en la que ha sido barrida por sus competidores más directos, Apple con el iOS y Google con Android.

Según Microsoft, el nuevo Windows 8 eliminará las barreras que existen ahora en lo referente a la instalación de un sistema operativo en un dispositivo determinado. Windows 8 ha venido para ser instalado en toda clase de dispositivos, ordenadores de sobremesa, portátiles, tabletas y teléfonos inteligentes.

Habrá dos versiones de Windows 8, una para ordenadores de sobremesa y portátiles basados en la arquitectura de Intel y otra, llamada Windows RT basada en procesadores ARM, que están presentes en la mayoría de tabletas y teléfonos inteligentes.

Desgraciadamente Microsoft ha anunciado que Windows RT no será 100% compatible con aplicaciones anteriores de Windows. Esa es una muy mala noticia para los que piensen en comprar la nueva tableta de Microsoft, llamada Surface. En pocas palabras, si se compra una tableta Surface sus programas que ahora corren en Windows puede que no funcionen bien en Windows RT.

Interfaz de Windows 8El interface de Windows 8 sorprende un poco a los usuarios de Windows en ordenadores de sobremesa, porque han suprimido el botón Inicio. Ahora la pantalla principal está poblada de iconos rectangulares, al estilo de los iconos que hay en los iPad y en las tabletas Android. Los programas se llaman aplicaciones, para seguir con la moda de sus competidores. Además, Microsoft ha preparado su propia tienda de aplicaciones, absolutamente necesaria para competir con las tiendas de Apple y Google.

Parece que Windows 8 tendrá la opción de presentar un interfaz tradicional, al que los usuarios de Windows 7 están acostumbrados. Nos parece una buena idea, ya que millones de usuarios de ordenadores de sobremesa preferirán seguir con el interfaz al que están acostumbrados manejando un ratón.

En la presentación el representante de Microsoft comentó que Windows 8 ha sido un renacimiento, ya que este nuevo sistema operativo ha sido rediseñado desde la base para hacerlo adecuado para las tecnologías de pantallas táctiles, aplicaciones de Internet y dispositivos portátiles.

Desde el punto de vista de la informática corporativa, no está claro que las empresas se pasen a Windows 8 rápidamente, ya que Windows 7 funciona muy bien y Windows 8 no va a ser gratis. Habrá que esperar para ver si la penetración de Windows 8 se limita a los dispositivos portátiles o si por el contrario conquista también los ordenadores de sobremesa.

Es interesante destacar la apuesta de Microsoft por ser un fabricante de ordenadores, ya que van a sacar una tableta llamada Surface que funcionará con Windows RT cuyo precio estará muy cercano al precio del iPad, pero con posibilidad de expansión de memoria, puertos USB y de vídeo HD y una pantalla de 10.6 pulgadas. Otra característica interesante de Surface es que su funda incorpora un teclado, por lo que sustituirá no sólo a los ordenadores de sobremesa, sino también a los portátiles y a las tabletas. En definitiva, Microsoft ha diseñado un dispositivo para todo y para todos.

El único pero que se puede poner a la tableta Surface a priori es el hecho de que, tal y como ha confirmado Microsoft, el software que funciona en versiones anteriores de Windows no será 100% compatible, ya que Windows RT está basado en procesadores ARM en lugar de los procesadores Intel sobre los que corrían las versiones anteriores de Windows.

Cuando Windows 8 esté en las manos de los usuarios la suerte de Microsoft estará echada. De momento, Linux le come terreno en los ordenadores de sobremesa, mientras que Apple y Google dominan las tabletas y los teléfonos inteligentes. Veremos si Microsoft tiene sitio en el futuro de la informática. El tiempo lo dirá.

 


Si te ha gustado el artículo compártelo y participa dejando un comentario. Gracias por colaborar.

«